Estás segura? - Cuento propio


Consigna: Escribir un cuento, que incluya: 1 objeto con un jeroglífico, 1 perro negro, 1 objeto filoso, 1 enano, 1 reloj antiguo, 1 espejo roto y que el narrador o narradora sea interno, en 1° persona.

"¿Estás segura?"

 Me encuentro corriendo en medio de la noche, no es un trote suave como si estuviese disfrutando del paisaje nocturno por el parque cerca de casa. Es una corrida desenfrenada, siento mi corazón pulsando a toda velocidad, la adrenalina me atraviesa el cuerpo, no entiendo que pasa. 
 De repente todo cae a mi mente, alguien me esta siguiendo, miro para atrás y veo una figura humana que esta a unos metros de mi, corriendo igual que yo, en su mano llego a enfocar una especie de cuchillo filoso.
 Esa figura me quiere secuestrar, no entiendo por que sucede esto. Giro a la izquierda en una esquina que creo conocer. Cuando logro poner en claro el entorno, me doy cuenta que es la cuadra de mi casa, sin parar el ritmo llego a la puerta de mi hogar a mitad de la cuadra. Al ingresar, toda la habitación se pone en blanco...

 Me despierto sobresaltada, todo fue un sueño, lo que acabo de vivir no fue real. Pero se sintió más real que la vida misma. Una sensación horrible me recorre el cuerpo, estoy toda transpirada y mi corazón está tan acelerado que tengo miedo que deje de trabajar en el próximo latido. Una vez que calmo mi cuerpo observo la habitación, todo esta oscuro, lo que demuestra que siguen siendo altas horas de la madrugada, seguramente entre las tres y las cuatro. A mi izquierda, colgando sobre la pared observo el reloj antiguo que herede de mis abuelos. Marcaba las tres de la mañana.
 Frente a mi cama tengo una pizarra de color blanco donde hago notas para no olvidarme que cosas tengo para el próximo día. No esta completamente en blanco, lo primero que percibo es una frase que me gustó de una canción. Pero rápidamente paso de ella por algo que me llama poderosamente la atención, no entiendo lo que dice ya que no es mi letra. Salgo de la comodidad de la cama y me paro frente a la pizarra para leer mejor. Mi aliento se corta al entender que es lo que dice la frase. Parece una escritura desaliñada, rápida, como si la persona tuviese miedo de que yo lo encuentre en medio del acto. "Estás segura que esto es real?".

 Me quedo lo que parece una eternidad frente a la frase que para muchos es insignificante pero a mi me paraliza completamente. Una vez que logro reaccionar vuelvo a meterme entre las sábanas que ahora se encuentran frías, seguramente por los 4 grados de este crudo invierno. Es obvio que no voy a poder conciliar el sueño, entonces agarro el celular que siempre está sobre la mesita de luz al lado de mi cama. Cuando lo desbloqueo poniendo el dedo en el lector de huella, lo primero que aparece en la pantalla son símbolos que no reconozco.
 Una rápida entrada en el buscador y descubro que se trata de escritura jeroglífica, pero no entiendo por que se encuentran en mi teléfono. Cansada de no tener explicaciones para lo que está pasando, tiro el aparato al piso y me tapo hasta la cabeza. Obligo a mi mente que se calme para intentar dormir entre la suavidad de mis sabanas blancas y acolchado de color gris, como toda mi habitación. 

¿Conocen esa sensación donde sentís que alguien te esta mirando mientras dormís? Algo raro estaba ocurriendo en mi espacio personal. Abro los ojos y parpadeo un par de veces para examinar el entorno. Ya es de mañana, no hace tanto frío ya que el sol pega en la ventana. Me encuentro frente a mi perro schnauzer de color negro, le empiezo a acariciar la pequeña cabeza hasta que me doy cuenta que en su collar rojo hay un papel enrollado finamente para que no se caiga de mi fiel amigo.
Desenrollo el papel y subo al enano de cuatro patas a la cama. Otra vez el mismo mensaje que me atormento en mi fantasía "estás segura que esto es real?", está vez el mensaje contiene una firma que creo conocer.

Cuando estaba en la escuela primaria me la pasaba practicando firmas para cuando sea grande. Junto a mi amiga de ese entonces, creamos lo que definimos como "la firma perfecta". Nunca la use por que me daba tristeza el recuerdo de esa chica con la que pasaba el mayor de mis ratos. Ella falleció junto a su familia en un accidente automovilístico.

¿Estás segura que esto es real? Yo no había escrito esto. El miedo y la nostalgia reinaba en mi. Decidida a resolver el misterio, salí de mi cuarto directo al living donde sabia que estaban mis padres. Al abrir la puerta que manteníamos cerrada para que no se vaya el calor de la estufa, me quedé helada frente al espejo que colgaba en la habitación, estaba roto, como si alguien lo hubiese pateado. 

Tras caminar cuidadosamente hacia el espejo, observo en el reflejo a una pequeña niña pálida, tenía el pelo del color del sol y unos ojos azules que te dejaban paralizado en medio de la habitación. Era mi compañera de aventuras de cuando tenía 10 años. Como yo estaba en shock, perdida en sus ojos, no me di cuenta que estaba tratando de decirme algo. Una vez calmando mi respiración percibo lo que me esta comunicando. "Estás segura que esto es real?"...
 Al instante un sonido horrible invade mi mente y colapsa en mis oídos, es la alarma que me avisa que es hora de despertar para enfrentar un nuevo día.

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